Opinión: Ana Belén
AGRICULTURA Y NATURALEZA Y AL REVÉS, NUESTRO MOTOR DE DESARROLLO
Por Ana Belén Martínez. Número 5 de la candidatura popular. Licenciada en Ciencias Ambientales. Máster en Gestión de Calidad y Medio Ambiente.
La Región de Murcia y su huerta es uno de los lugares más fértiles de la geografía española, con un sector agrario basado en la calidad, en el equilibrio medioambiental, con un alto porcentaje de riego por goteo, y en la inversión en I+D+I para garantizar la viabilidad de los nuevos cultivos implantados y la rentabilidad de los tradicionales. Muchos y de gran calidad son las variedades de frutos y cultivos que se trabajan en la Región gracias al esfuerzo y trabajo diario de nuestros agricultores y ganaderos, que consiguen que el porcentaje de productos que se exportan en mercados nacionales e internacionales vaya en aumento año tras año. Cada uno de los municipios de la Región cuenta con productos de gran calidad que generan bienestar social y económico para la sociedad, entre todos ellos destacamos Caravaca de la Cruz y la Comarca del Noroeste.
El sector agrario de la Comarca del Noroeste, como sector primario de nuestra economía y uno de los principales motores económicos de nuestro municipio, generador de empleo y de productos de alta calidad, sector del que todos dependemos, tendrá un peso importante en esta nueva andadura, se aunarán esfuerzos para potenciar las fortalezas del sector y mejorar las debilidades existentes. Nuestro propósito consiste en fomentar el sector agrario y forestal mediante un desarrollo sostenible, conservando la tierra, el agua y los recursos vegetales y animales, sin degradar el medio ambiente, técnicamente apropiado, económicamente viable y socialmente aceptable.
La función primordial de la agricultura y la ganadería es la producción de alimentos y de otros productos básicos, y contribuir a la seguridad alimentaria, tarea compleja que exige un medio ambiente favorable como el de nuestro municipio y una gestión que garantice la estabilidad y equidad social, cultural, política y económica, gestión por la que estamos trabajando. La combinación de las funciones económica, social y ambiental de la agricultura puede contribuir al cumplimiento de esos objetivos. La actividad agrícola y la utilización correspondiente de las tierras también generan una amplia gama de productos y servicios no alimentarios, configuran el medio ambiente, afectan a los sistemas sociales y culturales y contribuyen al crecimiento económico. Es decir, la Agricultura desempeña múltiples funciones de importancia tanto para la economía como para la protección del medio ambiente: almacena carbono en los suelos, mejora la filtración del agua y conserva los paisajes rurales y la biodiversidad, entre otras funciones. La Agricultura en favor de la Naturaleza y al revés. El sector agrario de nuestra Comarca, se complementa con la diversidad ambiental existente, la Comarca del Noroeste es la comarca forestal murciana por excelencia, gracias a ello existe una gran biodiversidad y unas grandísimas posibilidades de las que todos dependemos. Los montes son fuente de recursos naturales independientemente de la titularidad, desempeñan una función social relevante; fuente de recursos naturales, proveedores de múltiples servicios ambientales, protegen el suelo y el ciclo hidrológico, son fuente de fijación de carbono atmosférico, depósito de biodiversidad biológica y elemento fundamental del paisaje.
La importancia del medio rural, de sus necesidades, de su población, de las actividades económicas y productivas que alberga y de los servicios y valores propios que aporta y puede aportar a la sociedad en su conjunto. Es necesario fomentar la visibilidad y valorización del medio rural de cara al conjunto de la sociedad para que se conozca la nueva realidad de los territorios rurales, sacando a éstos de la invisibilidad y despojándolos de tópicos y viejos estereotipos y, contribuyendo a dignificar la vida y la imagen de los hombres y mujeres que viven en él, conseguir la igualdad de oportunidades de las mujeres y los jóvenes, y empoderar a la población local para que puedan ser partícipes y promotores del desarrollo socioeconómico en sus zonas.
Es importante realizar acciones que materialicen esta importancia y reconozcan a los territorios rurales un papel similar al de las zonas urbanas, afrontando sus necesidades y facilitando que puedan también contribuir al desarrollo socioeconómico, la sostenibilidad ambiental y la innovación, de manera que se avance hacia el equilibrio territorial.
Por todo ello, nuestras líneas de actuación a seguir tienen todas un objetivo común: colocar nuestro sector agrario y nuestras zonas rurales en el lugar que se merecen, ocupando un lugar destacado en todas nuestras acciones, centrándonos en todas y cada una de las necesidades y preocupaciones de nuestros agricultores y ganaderos, escuchando cada una de sus aportaciones, colaborando activamente en sus iniciativas y ayudando en todo lo que nos sea posible.
Crearemos un órgano consultivo donde estén representadas todas las organizaciones agrícolas y ganaderas locales junto con la Administración Pública. Pondremos en marcha programas de apoyo a asociaciones y cooperativas, también agricultores y ganaderos particulares. Pondremos todas las facilidades a nuestro alcance de información, divulgación y tramitación para que puedan optar a las ayudas agrícolas, ganaderas y forestales que vayan surgiendo por parte de la Comunidad Autónoma y de Europa.
Nos centraremos y trabajaremos para que los seguros agrarios sean unos seguros eficaces y de calidad, que ayuden a avanzar en los propósitos de agricultores y ganaderos, y no sean un quebradero de cabeza por sus precios y por sus limitaciones.
Apostaremos por cultivos experimentales y reforzaremos los cultivos ya existentes, consiguiendo así un desarrollo agrícola. Lucharemos para conseguir una ayuda para los cultivos de trufa y sus variedades, hongo que encuentra en nuestras tierras un lugar óptimo de crecimiento, pero no está al alcance de todos ya que su valor es demasiado alto para poder cultivarlo sin recibir una ayuda.
Apoyaremos los cultivos ecológicos, agricultura que busca el equilibrio con el ecosistema, utilizando de forma óptima los recursos naturales y sin utilizar productos químicos.
La seguridad ciudadana, tema que tanto preocupa a nuestros ganaderos y agricultores y a nuestro sector forestal y rural, será un tema primordial y por el que trabajaremos para conseguir que nuestras zonas rurales sean zonas seguras y tranquilas.
Incentivaremos un modelo de agricultura familiar sostenible, constituido por una agricultura familiar que reside y trabaja en el medio rural y cuya principal renta y dedicación proviene de la actividad agrícola y ganadera, que aplica métodos de producción ambientalmente sostenibles y conserva el patrimonio natural y cultural. Promocionando así, las posibilidades que el sector ofrece y facilitándolo a la gente joven que se introduzca en él, que lo conozca y que lo trabaje como sus antecesores lo han hecho siempre, es importante que no descuidemos nuestras tierras porque de ellas dependemos todos.
Mejoraremos el entorno rural con objeto de facilitar las comunicaciones, la residencia y la actividad económica sostenible en las poblaciones rurales, frenando e incluso revirtiendo el despoblamiento, en particular de jóvenes, reducir la distancia existente entre el medio rural y el medio urbano es uno de nuestros objetivos principales.
Caravaca de la Cruz posee un patrimonio natural, ecológico y cultural inmenso y de calidad y ese patrimonio hay que conservarlo y protegerlo, pero para ello hay que darlo a conocer, soy consciente y partidaria de lo que no se conoce, no se conserva. Por lo que divulgaremos y difundiremos el patrimonio natural y cultural de nuestro municipio y alrededores, a todo tipo de destinatarios: niños y mayores. Trabajaremos con los colegios, institutos, asociaciones, colectivos interesados, etc. El conocimiento de nuestro patrimonio es la mejor herramienta para protegerlo, cuidarlo y conservarlo.
En definitiva, la naturaleza nos proporciona múltiples bienes y servicios esenciales para el bienestar humano y para el desarrollo socioeconómico de la sociedad, y esos bienes, esos servicios y esos recursos naturales hay que gestionarlos y gestionarlos bien.
